Para mi princesa salidorra,por esa noche tan intranquila que paso ayer.Siempre estare a tu lado,nunca lo olvides.

“Mi mejor regalo,

Siempre has sido tú”

Capitulo treinta y tres:

Noto el frio recorrer todo mi cuerpo.Agarro la mata y me la acerco aun más a mi,todavía tengo los ojos cerrados,me niego a despertarme.Me muevo hacia en otro lado de la cama y choco con su figura.Me abrazo a él,y vuelvo a intentar dormirme.Era de día,yo lo podia notar por el nivel de luz que dañaba mis ojos (y mi sueño).Sentia su mirada clavada en mi a pesar de tener los ojos cerrados.Abro lentamente mis ojos,la luz me daña,me afecta y me llevo la mano a la cara mientras me acurruco contra su pecho.

-Buenos días –dice de una manera dulce sin apartar la mirada en ningun momento de mi.

-Buenas días –dije con la voz algo ronca.Intento sonreir de una manera dulce pero apensas consigo esbozar una sonrisa cansada- ¿qué,que pasa? –dije al notar que no aparta la mirada de mi.

-Que estas preciosa,bueno,siempre lo estas,ya lo sabes…-dijo acariciandome el pelo y aumentando el tamaño de su sonrisa- pero así,con cara de dormidita,aún más –e intento acercarse a mi para depositar un beso en mis labios.

-No,no,sabes que por la mañana tengo mal aliento –dije tapandome la boca con la sabana- aparte,no me mientras,seguro que tengo todo el rimel corrido,el pitalabios debe de estar toda mi cara y mi pelo debe ser un jungla.

-No,estas preciosa,más que eso,mucho más que eso –dijo acercando su boca a la mia- te quiero dar un beso…

-Dani… -dije regañandole.Él esbozo una pequeña sonrisa.

-Me da igual el aliento,me da igual todo,estas preciosa…-dijo acercandose aun más a mi y chocando su nariz con la mia- te sienta genial cumplir años…¡feliz cumple bonita!

Y esta vez no me resisti al contacto de sus labios.Me acurruque entre sus brazos y profundice el beso.Comence acariciar su cuerpo ¿Suyo? Ya lo sentia tan mio…Habia aprendido a reconer cada pequeño rincon de su piel,me sabia de sobra sus lunaras y el lugar donde le tenia que tocar para que su mundo desapareciera.

-No,no,no –dijo apartandose de mi- que me lias…-se levanto de la cama y comenzo a mirar en el armario.

-¿Qué haces? –dije sentandome en la cama en mi tipica posición,la de india.No entendia nada.

-Buscar tu regalo….-dijo buscando entre su monton de ropa desordenada.

-Pero eso puede esperar…-dije poniendome de rodilla en la cama y acercandome a él para volver a besarle.

-No,no puede –dijo sacando una caja del armario- te lo tenia que haber dado anoche…

-Tenemos todo él día –dije cogiendole de los pantalones y atrayendole a mi.

-Te equivocas,salimos en menos de una hora… -dijo dandome la caja.

-¿Eh?¿Donde?¿Tan pronto? –dije sentandome en la cama y sin prestar la menos atención a la caja.

-Sí,tenemos que pasar por León,le prometi a Chuspy que iriamos a ver a Carlota,te la tengo que presentar ¿recuerdas? –dijo sentandose a mi lado- ahora abre eso,no se si te va a gustar,tal vez no sea lo más adecuado y preferirias ropa o tacones…pero es lo que yo siento más nuestro.

-Seguro que me gusta,tonto,es tuyo –dije con una sonrisa depositando un pequeño beso en sus labios.

Abrí la caja lentamente,y vi varias cosas envueltas.Sonreí como una niña y cogí la más grande.Comence abrirlo con rapidez,rompi el bonito papel y me gire lentamente para mirarle.

-Pero…-dije temblando al ver el regalo.

-Se que tendras cientos,pero me pase un mes entero pensando que podia regalarte…y me acorde de ese día,de tu cara de ilusión al verlo en el escaparate,es una tonteria,pero sentia –no lo deje continuar y pose mi boca en la suya con un beso tierno pero fiero.

-Me encanta –dije separandome con lagrimas en los ojos y girando la cara para mirar al pequeño Winnie que tenia en las manos(no tan pequeño,la caja era bastante grande)- ¿Cómo te has podido acordar?

-Siempre me acuerdo de las cosas que me importan –dijo con una sonrisa en la cara- y tú me importas más que nadie.

Nuevamente me avalance sobre él para depositar en sus labios un beso un poco más fiero.

-Para,loca –dijo entre risas- Todavía te quedan dos regalos por abrir.

-¿Dos? ¿Por qué tantos? Con Winnie bastaba…-dije regañandole mientras achuchaba al oso.

-No,no bastaba.De todas formas el tercero no es por tu cumpleaños,porque te recuerdo señorita,que tú también me tenias que haber felicitado…-dijo con una sonrisa en los labios y tocando la punta de mi nariz con su dedo.

-¿Yo?¿Por qué? –dije extrañada mirandole fijamente.

-¿Qué dia es hoy? –dijo cruzandose de brazos.

Para chocho gordo,por razones que son evidentes.

“Y no hay nada mejor que tenerte bajo mis sabanas,

suspirando al entrecortado ritmo de mi corazón”

Capitulo treinta y dos:

-Me duelen los pies –dije nada más entrar a la habitación del hotel.

-Eso es lo que pasa cuando a la señorita le da por salir a dar un paseo con los tacones puesto –dijo mientras entraba al baño.

-Te recuerdo que la idea de ir a dar un paseo a sido tuya,no mia –dije mientras me quitaba un zapato y se lo lanzaba al baño.

-Si te ha encantado –dijo mientras salia del baño ya sin camiseta-te conozco…-se acerco a mi y rodeo mi cintura con sus brazos.

-Bueno,tienes razón…-y comence a acariciarle el pelo- Segovia es preciosa.

-Pero no tanto como tú –y esta vez fui yo la que se pego a su cuerpo- estas preciosa –dijo mientras me apartaba el pelo de la cara.

Subi mis manos hacia su nuca y empuje su cabeza haciendo que su boca chocara contra la mia en un beso ferroz.Mis manos bajaron instintivamente hacia su camiseta y comenzaron a jugar con su cuerpo.Él se rio entre mis labios por la brusquedad de mis acto y bajo sus manos hacia el final de mi espalda [culo,Sandra,se dice culo] para pegarme aun más contra él.Agarre sus labio con mis dientes y tire de él con fuera.Él al contrario que las otras veces,en vez de reir o quejarse,subio las manos para desabrocharme el vestido una rapidez casi enloquecedora.

-Eh –dije agarrando sus manos y parando el proceso- ¿qué a pasado con la “paciencia”? –no me separe de su boca,así que cada palabra iba intercalada por un beso.

-Yo no tengo de eso –dijo imitando mis besos intercalados- y sabes que tú tampoco –su boca bajo hacia mi cuello haciendo que mis piernas comenzaran a temblar.

Deje que sus manos terminaran el proceso y una vez que el vestido se encontraba en el suelo me agarro de la parte final [culo,culo,culo] de mi espalda dandome el pequeño impulso que necesitaba para enredar mis piernas en sus caderas.Comence a tirar de la camiseta con una brutalidad que casi asustaba y él se encargo de recostarme sobre la cama mientras mordisqueaba mi cuello.Suspire varias veces antes de darme impulso para hacerlo girar sobre la cama y cambiar las tornas de la situación.Comence a  la lucha con el boton de su patalon mientras él acariciaba mi espalda y su boca volvia a mi cuello.

Movio las manos hacia los estremos del sujetador y los solto con facilidad.Yo le sonreí,siempre tardaba un mundo en desabrocharlo.Baje mi boca hacia mi cuello y comence a bajar sus pantalones con las manos.Baje mi boca hacia su pecho y comence a pasar mis labios por él lentamente.Sonreí picaramente al llegar a su pezon y lo atrape entre mis dientes como él ya habia hecho muchisimas veces con los mios.

-Joder,como estamos hoy ¿no? –dijo suspirando e impulsandose para dejarme nuevamente debajo de él.

Sus labios volvieron a mi cuello y sus manos chocaron contra las mias sirviendo de apoyo para su cuerpo.Entrelace nuestros dedos al notar como su boca iba bajando.Senti como sus labios chocaban contra mis pechos y no pude evitar entrelazar nuestros dedos con fuerza.Alce las caderas para notar su cuerpo contra el mio y suspire varias veces al sentir el contacto de sus dientes contra mi pecho.

-Dani…-dije en un supiro.Me costaba repirar,tenia la respiración muy acelerada.

Él,entendiendo mi indirecta comence a deslizar mi ropa interior por mis piernas y yo alarge mis brazos para hacer lo mismo con la suya.Suspire al nota sus contacto y los segundos en los que él perdio la mano en el cajon para buscar el preservativo se me hicieron eternos.Rapidamente deslizo su cuerpo contra el mio  y clave mis uñas en su espalda al notar como se adentraba en mi interior.

Con el tiempo,las uñas fueron sustituidas por los dientes sobre su hombre y la respiración entre cortada cambiada por pequeños gemidos y susurros en su oreja.Alce mis caderas y arquee mis espalda consciente de que estaba llegando al estasis.Un pequeño gritito salio de mi boca y no pude evitar alzar la mirada para encontrarme con sus ojos.Él sonreía satisfecho sabiendo que habia cumplido su tarea y comenzo a acerlerar aun más el ritmo que llevaba su cuerpo.

Tras un pequeño gruñido se dejo caer sobre mi cuerpo.Comence acariciar su espalda y escondi mi cara en su cuello,inspirando su olor.Lentamente se fue separando de mi cuerpo para apoyar su espalda sobre la cama.Alargo su brazo y me coloco en su pecho,besando mi cabeza tiernamente.

-Te amo –dijo bajando su cabeza para encontrarse con mis labios y depositar un beso tierno en ellos.

-Te amo –dije separandome de él momentaniamente y volviendo a unir nuestros labios.

Para mi pelirroja,por ser mi gran apoyo aparte de mi hermana del alma.

"Que alegría más tonta,

volar sentado aquí."

Capitulo treintiuno:

-Me encanta este sitio –dije mientras me sentaba en la silla y le agarraba la mano.

-Sabia que te gustaría -dijo ya sentando con una sonrisa en la cara- pero ¿sabes que es lo mejor? –acercandose un poco a mi por encima de la mesa.

-¿El qué? –dije mirandole fijamente con una sonrisa inmensa en la cara.

-Que hay hamburguesas… -dijo con una sonrisa picara en los labios.

-Aaaah ¡te amo! –dije acercándome a él y depositar un beso en su mejilla.

Eran las diez de la noche y por fin habíamos decidido salir de la habitación de hotel,aunque debo reconocer que el cansancio me hizo replantearme por un momento eso de quedarme todo el día en la cama.Aun así,salimos,no sin antes poner el armario patas arriba gracias a no saber que ponerme.Supuestamente ibamos a cenar en el hotel y yo ya lo tenia todo planea,así que cuando empezamos a andar hacia un pequeño restaurante que había un par de calles más abajo pude evitar que me comenzara a temblar todo el cuerpo.

-Creo que te has equivocado de sitio,eh –dijo señalandose la boca y sonriendo.

-Dani…nos pueden ver…-dije mirando para ambos lados.

-No seas boba,estamos casi solos…-dijo agarrando mi cara con sus manos y acercandome a él.

Subi mis manos y las enrede entre su pelo.Me pege un poquito más a él y roce sus labios levemente.Le mire a los ojos y sonreí.El subio la mirada de sus labios,a mis ojos y se apodero de mis labios con un beso fiero pero pausado.

-Estas loco –dije separandome de él lentamente y acariciandole el pelo.

-No,solo quiero disfrutar al maximo este fin de semana…-dijo entrelazando mi mano con la suya y llevandose a la boca para depositar un pequeño beso en ella.

-Y lo vamos a disfrutar,tranqui.. –dije dejando un pequeño beso en sus labios.

-¿Qué va a querer la niña de cenar? –me pregunto mientras cogia un trocito del trozo de pan que habia en la mesa (yo le llamo chusco,pero como no se como le llamais digo “trozo”).

-Hamburguesa –dije mientras le mientras le miraba comer el trozo de pan,estaba muerto de hambre- ¿tú?

-Lo mismo que tú,eso si..es postre lo elijo yo –dijo guiñandome el ojo.

-¡Dani! –dije pegandole suavemente en el brazo.

-¿Qué? ¡Es que hay muchas cosas en la carta! –dijo riendose- ¿qué pensabas,mente sucia?

-¿Yo? –dije señalandome nada- yo no pienso en esas cosas.

-Ya,ya –dijo sonriendo- ya veo. Por cierto ¿quieres que vayamos a dar un paseo cuando acabemos o prefieres salir mañana?

-No sé ¿tú,que quieres hacer? –dije ya con la carta de los postres en la mano.

-A mi me da igual,te dejo elegir.Eso sí,tenemos que estar en el hotel a las doce…-dijo echandose agua en su baso.

-¿Por? –dije apartando la vista de la carta y mirandole a él.

-Porque te espera un regalito en la habitación –dijo con una sonrisa tierna y mirandome fijamente.

-Dani…-le regañe dejando la carta de los postres a un lado- no hacia falta,ya me has traido aquí,estamos solos,disfrutando de este fin de semana,no quiero nada más,enserio.

-Pero yo si quiero,además,es tu cumpleaños,te mereces que te mime un poco ¿no? –dijo acercándose a mi y acariciándome la cara.

-Sí,pero no tanto,jope…-dije como una niña pequeña.

-Bueno,es lo que yo quiero hacer –dijo besando mi mejilla- y ya sabes que no le tienes que llevar la contraria tus mayores.

-Imbecil –dije riendo levemente.

-Anda,venga,vamos a cenar…-dijo llamando al camarero.

-No es justo,ahora me voy a tirar toda la cena pensando en el regalo….-dije con mi hamburguesa ya en la mano,varios minutos después.

-Te aguantas,tienes que aprender a ser menos impaciente…-dijo pegandole un gran mordisco a su hamburguesa.

-Luego dices que yo soy el desastre –dije riendo al contemplarle la cara.

-¿Qué pasa? –dijo depositando la hamburguesa en el plato.

-Tienes todo la cara llena de Ketchup –dije todavía riendome.

-¿Aquí? –dijo señalandose un lugar de la cara,nege con la cabeza y él señalo otro punto-¿aquí? –volvi a negar- ¿aquí? –esta vez su voz era más desganada.Volví a negar-quitamelo tú.

-Va –me acerque a el beso la comisura de sus labios muy despecio.

-Sabes que eso me puede…-dijo agarrandome de la cintura.

-Tendras que esperar…-dije apartandome de él y sonriendo-tienes que aprender a ser menos impaciente –y le mire con picardia.

Para Anna,por ser tan impaciente.

“Y no hay nada más bonito,

que dormir entre tus brazos.”

Capitulo treinta:

Me desperte sientiendo un aire frio recorer todo mi cuerpo.Me retorci en el asiento y abrí los ojos lentamente.Volví a cerrarlo tras chocarme con la fuerte luz de sol y me gire lentamente para mirarle a él.Me acaricie los brazos con las manos,hacia muchisimo frio.Ví como él giraba rapidamente su cabeza para mirarme fijamente.

-Buenos días dormilona –dijo con una pequeña sonrisa.

-¿Qué da mucho? –dije como una niña pequeña,siempre he sido muy impaciente.

-Casi nada,una hora como maximo –dijo riendo levemente ante mi impaciencia.

-Tengo frio…-dijo con la voz algo ronca a causa de mi recien despertar.

-Hay una sudadera en la parte trase,supose que tendrías frio...es algo vieja,pero sirve –dijo dedicandome una sonrisa tierna.

Me desabroche el cinturón y le di un pequeño beso en la mejilla.Meti mi pequeño cuespo entre nuestros asiento y me dispuse agarrar la susdadera.Senti como una mano palmeaba  el final de mi espalda [nota de autora: sabes que yo soy muy fina y no digo palabras como culo (ya ya ya,no me lo creo ni yo)] y no pude evitar soltar un pequeño gritito.

-Imbecil –dije volviendo a sentarme en mi asiento y metiendo la cabeza en la sudadera- ¿Cómo es que tenias una sudadera? Nunca te he visto con una…

-Ya te he dicho que es algo vieja…-dijo mirando como me ponia la sudera,estabamos prácticamente solos por esa carretera.Se rio ante mi torpeza para meter la cabeza en el agujero y me peino al ver todo mi pelo revuelto.

-¿Cómo de vieja?¿De cuando tú eras joven y todo eso? –dije con una sonrisa picara en los labios.

-Ja,ja,que graciosa se ha levantado la niña –dijo ya con la mirada en la carretera.

-Me duelen las piernas…-dije mientras me volvia abrochar el cinturón y me giraba para mirarle.Llevabamos ya casi tres horas de viaje y me dolia no todo el cuerpo.

Bueno,en realidad me habia pasado dos horas y media durmiendo,pero bueno,eso no significa que no pueda quejarme.

-Ya estamos llegando,chiqui –dijo con ternura- nos quedan menos de quince minutos para llegar al hotel.

-¿Vas a querer salir en cuanto lleguemos? –dije cruzandome de brazos y sin apartar la mirada de él.

-Como tú quieras,a mi me da igual…-dijo con la mirada fija en la carretera pero acariciandome la pierna con una mano.

-Bueno,yo creo que deberíamos salir un rato,así nos despejamos…pero por otras parte supongo que tú estarás cansado y querrás pegarte una ducha,así que mejor nos quedamos y ya salimos a la hora de cenar ¿no? –dije mientras abria la guantera para sacar un paquete de chicles.

-Me parece bien –dijo con una sonrisa.Aprovecho que el semaforo en rojo para depositar un pequeño beso en mis labios que yo me encarge de convertir en un beso eterno- estas mimosa ¿o qué? –volviendo a arrancar el coche.

-Un poco…me encantas estar aquí,contigo,solos…-y esta vez fui yo la que acarcio su pierna- ya lo necesitaba.

-Bueno,tranqui,tenemos todo el día para nosotros solos…-dijo acarciando mi mano y dedicandome una pequeña sonrisa.

Me limite a observarle durante el resto del camino,sin decir palabra,simplemente escuchando la musica y memorizando cada uno de sus gestos,queria guardar ese momento en mi memoria,hacerlo eterno…Pero en apenas diez minutos ya estabamos en la habitación de hotel.Mientras yo sacaba mis cosas de la maleta el aprovecho para pegarse una ducha,no si antes despedirse con un besos…Esas eran las cosas cosas que me enamoraban de él,el hecho de que no pudiera estar ni si quiera cinco minutos sin besarme o siemplemente tocarme,parecia que le queba tenerme cerca y no acariciarme.Sonreí como una tonta al verlo salir con la toalla envuelta en la cadera,y me acerque a él para darle un abrazo.

-Que bien hueles –dije escondiendo la cabeza en su cuello.Él rodeo mi cintura con sus manos y me pego más a él.

-Porque estoy limpito –dijo dándome pequeños besos por el cuello.

-Sí –dije separándome con una sonrisa maliciosa- y dentro de dos minutitos yo también.

-Podrías esperarte un poco…-dijo volviendo a acercarme a él.

-No,no,no…-dije separándome y riendo- tú deshaz tu maleta,anda.

Me dirigi hacia el baño con una sonrisa en la cara y me meti en la ducha al ritmo de “El encuentro” de Supersubmarina [Para Ana,por esas cosas que ella sabe de sobra]. Después de quince minutos de agua caliente y repetir la canción por quinta vez salí con la toalla alrededor de mi cuerpo y sonriendo como una idota.Cogí mi pijama de Goofy y me coloque la parte de arriba.Algo me decia que esta noche no necesitaria mucha ropa.

-Da… -dije mientras salia por la puerta.

Mi cara cambio completamete al verlo sobre la cama,con medio cuerpo fuera pero durmiendo profundamente.Me acerque a él y me tumbe en su pecho mientras le acariciaba el pelo.A veces,los mejoros momentos,son los menos inesperados.

- ¿Cómo sabés cuando un amor es real?
+ Simplemente lo sabés.
 - Yo siento que se me acelera el corazón, que mi sangre se enloquece ¿Cómo se frena esta locura?
+ No, no lo frenás. Simplemente dejás que ocurra.
- Hay que terminar con esta locura.
+  No se puede, porque el amor es revolución.
La revolución es como el amor, a veces tarda en llegar, pero cuando llega no se puede frenar.
Ustedes viven en una burbuja, una vida de película, sin saber que en las sombras por debajo hay otra vida, latiendo.
Te da miedo la palabra revolución, porque te suena a algo que va a cambiar tu vida por completo. Pero en este caso revolución significa que todo vuelva a ser como debe ser.
La revolución como el amor pone tu vida patas para arriba, te cambia, te hace vibrar.
La revolución y el amor se parecen, los dos son una necesidad, te arrasan y te hacen sentir vivo, otra vez. Porque el amor es una gran revolución creativa.

Para Ana,porque es libro que marco mi vida,y solo ella puede entender lo grande de las pequeñas cosas.

Cuando estás mal, cuando lo ves todo negro, cuando no tienes futuro, cuando no tienes nada que perder, cuando... cada instante es un peso enorme, insostenible. Y resoplas todo el tiempo. Y querrías liberarte como sea. De cualquier forma, de la más simple, de la más cobarde sin dejar de nuevo para mañana este pensamiento: <<Ella no está.>> Ya no está. Y entonces, simplemente, querrías no estar tampoco tú. Desaparecer. Plaf.


Sí, ese día hubieras querido encontrar a uno de esos magos: colocan un pañuelo sobre una paloma recien aparecida y, paf, de repente ya no está. Ya no está y basta.[...] Ha pasado el tiempo. Dos años. Y ahora saboreo una cerveza. Y acordándome de cómo me hubiera gustado ser esa paloma, sonrío y me siento un poco avergonzado.


Un inmenso ruído envuelto en silencio.


O la cerveza se me ha subido o es ella y sus preguntas las que hacen que la cabeza me de vueltas. O el dolor de ese amor aún no olvidado. Ya no entiendo nada.


No hay nada peor que quien espera algo... y no encuentra nada.


El amor, en cambio, es cuando no respiras, cuando es absurdo, cuando echas de menos, cuando es bonito aunque esté desafinado, cuando es locura... Cuando sólo de pensar en verla con otro cruzarías a nado el océano. 


Son tantas las cosas que echo de menos... Pero hoy tengo ganas de no pensar.


Eran otros tiempos. Tiempos de amor.


Basta. Estoy fuera. De los recuerdos. Del pasado. Pero también estoy perdido. Antes o después las cosas que has dejado atrás te alcanzan. Y las cosas más estúpidas, cuando estás enamorado, las recuerdas como las más bonitas. Porque su simplicidad no tiene comparación. Y me dan ganas de gritar. En este silencio que hace daño. Basta. Déjame. Ponlo de nuevo todo en su sitio. Así. Cierra. Doble vuelta de llave. En el fondo del corazón, allí, en aquella esquina. En aquel jardín. Algunas flores, un poco de sombra y después dolor. Ponlos allí, bien escondidos, te lo ruego, donde no duelan, donde nadie pueda verlos. Donde tú no los puedas ver.

Para Paula,Ana(mi princesa),María(lululugar) y Raquel (RaquelFdezFdez) por estar siempre a mi lado de una manera u otra y alegrarme la vida.

“No hay nada alrededor,

no hay nada mejor.”

Capitulo veintinueve:
Me han jurado y perjurado un monton de veces que los finales inesperados son los mejores,aun así,yo siempre he sido una impaciente y eso es algo que jamás podré cambiar de mi.Me gusta imaginar al detalle todo lo que pasara a cada instante en las cosas que realmente me hacen ilusión ¿sabéis ese cosquilleo de alegría mezclado con algo de miedo cuando esperas algo con mucha pero mucha ilusión? Eso es lo que yo sentia,sentia como todo mi cuerpo reacionaba ante mis pensamientos,los sentia como hechos.

Sonreí al verle con la mirada fija en el movil y golpe con cuidado la ventanilla.Él me vio y me abrio la puerta del coche desde su asiento mientras me miraba con una sonrisa radiante en su cara.

-¿Lista para empezar el finde de tu cumpleaños? –dijo mientras giraba su cuerpo para mirarme mejor.

-La verdad es que no…si no me abres el maletero ¿donde piensas que voy a guardar esto? –dije señalando mi maleta.

Salio del coche y se dirigio a la parte trasera del coche y yo me limite a seguirle.Cogio la maleta y la metio en el maleto mientras ponia una cara rara.

-Por dios,como pesaba eso ¿se puede saber que llevabas en maleta,hija?¿un muerto? Nos vamos solo dos días…-él me miro serio y yo le sonreí tiernamente mientras me encogía de hombros- bueno,te lo perdono porque mañana es tu cumple –dijo acercandose a mi y cogiendo mi cara entre sus manos mientras me acercaba a su boca.

-¡Dani! –dije en un susuro mientras giraba la cabeza para mirar a la acera- nos pueden ver…

-Me da igual –dijo haciendo mi cabeza girar de nuevo y robandome un beso.

-Imbecil –dije entre risas mientras me dirgia al asiento del coopiloto.

-Tu idiota –dijo con una sonrisa mientras se sentaba en el asiento del conductor- ¿Estas nerviosas? Veintitrés años ya…-se abrocho el cinturón y puso una mano en mi pierna.

-Calla,no me hables de eso,que me hago vieja…-dije apartando la mirada para mirar por la ventanilla.

-Si tú eres vieja ¿yo que soy? –dijo agarrando mi cara y obligandome a mirarle.

-Pues tú…tú…tú eres un abuelo de esos de residencia –dije juntando mis manos alrededor de su cuello.

-Bien que te gusta este abuelo –dijo depositaba un pequeño beso en mi mejilla- anda,vamos enana,que tenemos que salir ya –me deposito otro pequeño beso pero esta vez en la boca y volvió a colocarse bien.
-Oye,enana tampoco,eh –dije metiendo el cede en el reproducctor- soy toda una mujer…Nunca debi enamorarme,vivir sin ti cariño,lo que me esta costando –cantando a toda voz mientras movia las manos al son de la música.

-Ya,todo una mujer…-dijo parando el coche a causa de un semaforo en rejo y fijando su mirada en mi con una sonrisa- Te amo –me aparto el pelo de la cara y me robo un beso.

-Y yo a ti –dije con una sonrisa mientras le observaba  poner el coche de nuevo en marcha- lo nuestro se acabo,esto es así te guste o noo –volviendo a cantar a toda voz,él comenzo a reir sin apartar la mirada de la carretera.

-¿Te vas a tirar todo el viajecito dando berridos? –dijo giranlo su cabeza levemente para mirarme.

-La culpa es tuya ¿para que te traes este CD? Me incitas…-dije mientras me cruzaba de brazos y le miraba fijamente.

-¿A que te incito? –dijo levantando un a ceja y sonriendome de manera picara.

-Mal pensando –dije pegándole una pequeña colleja- ya sabes a lo que me refiero…me pones esta música y es imposible que no te cante…

-¿Ah,que estabas cantando? –dijo riendose levemente,le pegue un pequeño puñetazo en el brazo y se rio más fuerte- Joder como estamos hoy,eh.Como sigas así me doy la vuelta y te quedas sin viaje…

-No serias capaz –dije con una sonrisa en la cara sin apartar la vista de él.

-¿Y por qué no,listilla? –dijo mirandome seriamente mientras yo seguia con mi sonrisa en la cara.

-Pues porque me quieres mucho y estas deseando pasar un finde semanas a solas conmigo…-dijo alzando mi mano para acariciarle el pelo mientras él volvia la mirada a la carretera.

-Bueno,te equivocas,en realidad es verdad que no pararia el coche,pero es porque te tengo que devolver algo….-dijo con una sonrisa en los labios y desvio la mirada un segundo de la carretera para mirar mi cara.

-¿Devolverme?¿A mi?¿El qué? –dije girándome completamente para mirarle como una niña pequeña y poder examinar su cara mejor.

-Ya lo veras,no seas impaciente –dijo mientras volvia nuevamente la mirada a la carretera.

Me cruce de brazos y volví a reincorporarme en el asiento para comenzar a cantar una vez más.